El brunch en España
Recursos

El brunch en España

El brunch era un hábito ajeno a las costumbres españolas hasta hace pocos años. Por los horarios laborales poco flexibles y tradición, esta comida de media mañana –entre las once y la tres- no se realizaba. Pero a finales de 2012 el brunch se empezó a ofertar en bares, restaurante y hoteles. No fueron pocos los que se apuntaron a la idea de “comer algo a media mañana” que se diría en España.

El brunch ofrece la posibilidad de comer algo no demasiado pesado a esas horas y puede ser dulce o salado dependiendo de lo que desee cada uno. En un principio la idea fue bien acogida por muchos que se animaron a incluir una comida más en su rutina diaria. Aunque es cierto que fue un añadido en locales de comida de alto nivel económico, no es una costumbre que haya llegado a toda la población. Del mismo modo, también se ha quedado dentro de las grandes ciudades españolas.

Quizá por esto, a finales del 2014 se empezó a escuchar hablar del fin del brunch en España. Los locales que lo ofertaban comenzaron a hacerlo un par de días por semana o solo los fines de semana.

Muchos se preguntan por qué no ha triunfado, aunque todavía es pronto para valorar. Las rutinas alimenticias de una sociedad no cambian en tan poco tiempo. Quién sabe si en un par de años se habrán extendido más. De momento, es cierto que muchos locales han encontrado una clientela estable que se acerca muchos días a tomar el brunch.

Aparte, también existe la opción de que se asimile de un modo distinto. El brunch tiene más seguidores los fines de semana, cuando los españoles se levantan tarde por haber trasnochado. Quizá sea una costumbre que se asiente solo esos días.

De momento, llegó con fuerza y ha perdido muchos de los adeptos iniciales, pero... ¿quién sabe qué pasará con él en España?