Pamplona y lo que no sabías sobre San Fermín
Es la fiesta española más famosa del mundo, de eso no hay duda. Desde que el bueno de Hemingway mencionara los sanfermines en su obra “Fiesta” hasta ahora, un número indeterminado pero gigantesco de turistas ha experimentado lo que es el miedo mezclado con la francachela. Esta mixtura hace que no reparemos en algunos datos curiosos y jugosos de la fiesta. Así que os vamos a mencionar algunos.
- El pañuelo rojo para muchos simboliza la sangre que manó de la garganta de San Fermín al ser decapitado.
- En los días anteriores al comienzo de la fiesta las curvas más peligrosas del recorrido de los encierros se tratan con un producto antideslizante.
- El santo patrono de Pamplona no es San Fermín sino San Saturnino: San Fermín es el patrono de toda la comunidad de Navarra.
- Aunque se dice que los sanfermines nacieron allá por 1591, el chupinazo data de época más reciente: el primero sonó en 1931.
- Un encierro dura unos pocos segundos, pero puede llegar a durar ¡hasta media hora! Así pasó en 1958: uno de los toros se negó a entrar a la plaza hasta que llegó un pequeño perro que le mordió los tobillos y le hizo pasar al ruedo. Se sabe que el perro fue paseado a hombros por los pamplonicas.
- Tened cuidado: en toda la historia de los sanfermines sólo hubo un año sin heridos por asta de toro, fue 1968.
Quizá son datos triviales, pero recordad que un buen conocedor puede llegar muy lejos; sobre todo si da con una peña de "las de toda la vida".